Antes de comenzar a escribir este manifiesto, decidimos visitar la página de Internet oficial de la Argentina Oro 2008. Queríamos conocer que se ofrecía desde esta entidad, cuales eran sus posturas, propuestas, quienes la integraban y todo aquel dato que nos sirviera para conocer la óptica de estas personas. Ya en el sitio, ingresamos a la sección del Comité. Nos bastó identificar a dos individuos como para sacar una rápida conclusión.
El presidente "honorario" (entre infinitas comillas) del mismo es el Sr. gobernador de San Juan: Don Gioja. ¿Presidente "honorable"? ¿Una persona que dice descaradamente que ama y cuida a su pueblo y lo está condenando a la desgracia y muerte segundo a segundo? Honorable. Creemos que se equivocaron y encontraron este término en un diccionario de antónimos. Como integrante del comité ejecutivo se encontraba Julián Rooney
Julián Rooney: nos suena a una marca registrada. La marca de la contaminación probada. Cada vez que escuchamos su nombre, lo primero que aflora es: contaminación. Bien colocada su función en esta conferencia: ejecutivo, pero ejecutor de los pueblos. Otras fotografías aparecían. Solo se dejaban ver oscuras y maquilladas sonrisas de estos personajes, como si estuvieran festejando el evento más importante de sus vidas, según ellos, tal vez más importante aun que vivir. Nos recordaba las viejas fotos de los cowboys del oeste donde aparecían quienes eran buscados como delincuentes huidizos de la justicia.
Argentina Oro 2008: una conferencia destinada a mas y mas delincuentes, obstinados en encontrar quienes que se quieren sumar a su banda de delincuentes, destinada a quienes quieren cabalgar en sus 4x4 por nuestras tierras y descubrir donde se encuentran los preciados metales para luego extirparlos con todo un arsenal de violenta tecnología.
Transcribimos textual uno de los fundamentos de la Argentina Oro 2008: "Los fundamentos de la programación de Argentina Oro 2008, se centran en los nuevos paradigmas que vive el mundo actual. Es decir, el cuidado del medio ambiente, la salud, el desarrollo sustentable y sostenible bajo las normas de la Responsabilidad Social Empresaria y las relaciones con la comunidad".
¿Estos son los nuevos paradigmas que vive el mundo actual?
¿No se confundieron de planeta estos señores ignorantes?
Creíamos que los nuevos paradigmas para estos tiempos eran solucionar la pobreza, brindar educación a la población, asegurar un sistema de salud público y gratuito, proveer alimentos sanos a los individuos… en fin, ayudar a que este mundo mejore en pos de todos. Se ve que estudiamos de escuelas paradigmáticas muy diferentes.
Nos preguntamos a menudo:
¿Qué tiene esta gente en la cabeza?
¿En que piensan día a día?
¿Cómo ven la vida desde la óptica que eligieron para transcurrirla?
En síntesis podríamos deducir, con simplicidad, que estas personas no son nada más que egoísmo puro. Día a día piensan en como perfeccionar su egoísmo y de esta manera, solo pueden vivir la vida egoístamente. Alimentados por un juego de oscuras fuerzas, sostienen esta actitud de querer todo para ellos, sin importarles nada en absoluto. No les importa nada realmente, ¿o sí? Tal vez sí: solo les importa como aumentar un poco más sus cuentas bancarias. Su única derrota, según ellos, sería no llegar a superar todo el tiempo, la cantidad de dinero que tenían el día anterior. Dinero. Dinero para comprar lo comprable. Dinero y poder. Poder para dominar. Poder para decidir anárquicamente. Poder para tener más dinero y más poder.
¿A dónde se piensan que van a llegar así?
¿Acaso creen que al llegar a acumular cierta suma de riqueza podrán comprar acciones en los cielos y al adquirir el 51% tener mayoría en el comité de accionistas y destituir a Dios?
La minería sustentable.
¿Lindo slogan, no?
Sustentable. El diccionario de la Real Academia Española define la palabra sustentabilidad de la siguiente manera: "conservar algo en su estado". Repetimos: "conservar algo en su estado". Allí donde los pueblos vivían de sus economías regionales, artesanales, de manera pacífica, y ahora escuchan el ruido de la dinamita, el crujir de sus viviendas cuando circulan los inmensos camiones, las oficinas al estilo Wall Street, las 4x4 en vez de las llamas y caballos, ¿eso es conservar algo en su estado? Si allí donde había una montaña queda un cráter de inmenso tamaño, ¿eso es conservar algo en su estado? Si allí donde las purísimas aguas acariciaban las tierras en un recorrido ancestral se las succiona a velocidades terribles y contamina en millonésimas proporciones con venenos como el cianuro, ácido sulfúrico, mercurio y otras decenas de minerales contaminantes:
¿Eso es conservar algo en su estado?
Si allí donde los vientos transportaban las más puras brisas, ahora vuela en ellos arsénico, plomo, uranio, ¿eso es conservar algo en su estado?
Extraer algo de un planeta finito, que no puede ser nuevamente utilzado porque se lo ha destruido o contaminado, no tiene ninguna correspondencia con el término sustentable. Sustentabilidad. De ninguna manera aceptamos esta desquiciada propaganda. De ninguna manera la aceptamos.
Sustentable eran los lugares antes de que los mineros llegasen. Sustentable era la vida silenciosa de las altas cumbres. Sustentable era el agua natural que bebían los habitantes, animalitos y plantas de esas tierras. Sustentable era la vida que nuestros hermanos llevaban antes de que se instalaran las mineras del diablo.
Ojala estos señores tuvieran un poquito de consciencia para recordar el mas divino y amoroso acto de minería que ocurrió en el vientre de sus madres, donde por la gracia de este universo, se obtuvieron los mas preciosos elementos para constituir, de la manera mas hermosa captable por el ojo humano, los cuerpos que les permitirían transitar este planeta. Eso es verdadera minería. Verdadera obra creativa. Verdadero amor.
Lo que hoy propone la mega minera química a cielo abierto, no es más que un insulto a la vida. El peor de los insultos: la falta de gratitud por existir, y hacer algo positivo por la existencia.
Sin ilusiones, hermanos. Sin ilusiones se camina. No nos ilusionemos que estos señores de las tinieblas tomen consciencia de lo que están haciendo. Ellos depositan día a día toda su energía en cultivar aun mas esa actitud de absoluta indiferencia para con la vida. Ellos no pueden ver. Están ciegos y sordos ante nuestras palabras. A ellos solo les hablamos para decirles:
Los ciudadanos del territorio argentino, decimos NO a la minería química con la modalidad a "cielo abierto" y a la minería radiactiva en todas sus modalidades (cielo abierto o por galerías).
Pedimos la nulidad y derogación de la Ley de Inversiones Mineras (Ley Nacional 24.196) y normas complementarias. Exigimos la derogación y anulación por parte de la República Argentina del "Tratado de Integración Minero Argentino-Chileno". Reclamamos el cierre definitivo y la recomposición del ambiente, según el art. 41 de la Constitución Nacional, de todas las minas abandonadas y aquellas que están funcionando y no respetan la ley general del ambiente (ley nº 25675).
Pedimos previa autorización expresa para la utilización de recursos hídricos compartidos de las poblaciones de las provincias potencialmente afectadas por un emprendimiento minero que se expresarán por referéndum y demandamos la participación de la autoridad ambiental nacional en caso de efectos ínter-jurisdiccionales. Pedimos se respeten estrictamente los principios ambientales preventivo, precautorio y de sustentabilidad contenidos en la ley general del ambiente y la sanción de caducidad de las concesiones mineras en caso de incumplimiento. Reclamamos la detención y prisión de los empresarios mineros que contaminan el medio ambiente con sus delitos y la misma condena para los funcionarios públicos cómplices. Denunciamos los planes nucleares que se fomentan desde el gobierno y enriquecen a los empresarios mineros que desarrollan emprendimientos mineros radiactivos.
Reclamamos expresa "Licencia Social" y participación ciudadana real y efectiva previas a los procesos de autorización de actividades mineras.
Todo ello, le decimos a ellos y a los gobernantes que los apoyan. A los proveedores cómplices que les permiten continuar con su actividad. A las personas que alaban la minería sin saber nada de ella y solo basándose en los beneficios económicos que teatralmente dejan.
Por ello, no les hablamos a ellos cuando nombramos la paz, el amor. Les hablamos a ustedes que la buscan. A ustedes, que a toda costa, quieren que reine la armonía en este mundo sediento. Este mundo que se está muriendo por beber un poco de amor. Este mundo que nos ve caminar por su esférico cuerpo, esperando que derramemos una gota de compasión.
Hermanos. Seamos mineros nosotros, no ellos. Ellos no hacen minería. Ellos destruyen saquean y contaminan todo a su paso. Ellos no saben lo que es la verdadera minería. La verdadera minería consiste en escarbar allí donde no nos conocemos. En dinamitar aquello que ya no nos sirve para transitar la vida. La verdadera minería consiste en extraer, de lo más profundo de la consciencia, los elementos que se constituirán como materia prima para edificar un mundo sustentable. Un mundo que en su propia naturaleza siempre fue sustentable. Un mundo sustentado por la Vida que siempre se mostró abundante hasta que el egoísmo inicio su incansable jornada de satisfacer sus avaros caprichos, sus deseos de codicia, y sus ansia de vanidad.
El plomo no sirve para darle de amamantar a nuestros hijos. El ácido sulfúrico no sirve para tomar un mate cocido El cianuro no sirve para regar los cultivos. El oro no sirve para tejer nuestras vestiduras. El uranio no sirve para que los niños jueguen a construir castillos de arena.
Argentina no es Minería. Argentina es una porción hermosa de este planeta. Una porción inmensamente rica en vida. Un lugar que busca nacer con una renovada forma de existencia. Una existencia sustentable. Una vida sustentable.
Sí a la Vida.
Conciencia Solidaria
ONG Interprovincial
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