Extrañas versiones sobre el hecho.
Hallan explosivos en el centro y dan una confusa información.
Gendarmería dijo que los encontró un comerciante en un tacho de basura.
Tres cilindros conteniendo material explosivo de alto poder, que se hallaban sin detonador y por ello mismo sin posibilidades de estallar, fueron encontrados en un tacho de basura por un civil, informó ayer la Gendarmería Nacional, que intervino en el caso.
Un informe oficial de la fuerza dado a conocer ayer, indica que en las primeras horas de la víspera una patrulla que circulaba por la avenida La Rioja al 1.300 recibió un pedido de colaboración de "E.E.V., comerciante", quien "informó en forma espontánea que días anteriores, sobre calle Alvear, entre la avenida Belgrano y pasaje Arteaga encontró en el interior de un canasto de hierro una bolsa plástica que por su forma le llamó la atención y que al abrir la misma encontró un envoltorio con diarios conteniendo en su interior tres objetos de forma cilíndrica de color marrón con inscripciones varias".
"El causante -agrega el parte- entrega el material al personal, quienes constatan la veracidad de lo expuesto y ante esta situación y por tratarse de objetos explosivos se montó un cordón de seguridad".
El documento oficial especifica que se trataba de gelamita, que es "un alto explosivo de uso civil (minería)" y que se puso en conocimiento del hecho a la Justicia Federal, que ordenó el secuestro del material e inició las actuaciones destinadas a esclarecer el suceso.
La Policía de la Provincia, luego de que trascendiera el hecho, dispuso un operativo de seguridad en la zona, ya que el lugar en el que supuestamente fue hallado el material explosivo, se halla cerca de las oficinas del ex gobernador de la provincia y actual senador nacional, Juan Carlos Romero, donde hay, además, guardia permanente.
De todos modos, la información de la Gendarmería es confusa y difiere de la que maneja la Policía de la Provincia (ver recuadro) ya que señala que se hizo un cordón de seguridad, no explica dónde y tampoco hay precisiones sobre por qué un civil denuncia el descubrimiento del explosivo días después de haberlo hallado y lo entrega a 10 cuadras de distancia de donde lo encontró.
Fuente: Diario El Tribuno - 19-Oct-2008
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