En la localidad chaqueña de Charata, que tiene 30.000 habitantes, ya se detectaron 5.000 casos de dengue. Los hospitales y las clínicas privadas no dan abasto y ya se produjo una muerte como consecuencia de una complicación de la enfermedad. Cada día llegan 100 nuevos casos de pacientes con síntomas de la patología.
Fariña, junto con otros cuatro profesionales del Sistema Provincial de Salud (Siprosa), viajó primero a Tartagal, Salta, y luego a Charata. Fueron enviados por la Dirección Nacional de Emergencias Sanitarias.
“Si bien en Tartagal la situación está estable, en Chaco es preocupante, porque cada día aparecen nuevos casos”, relató el profesional, y añadió que se quedó impresionado porque se trata de una enfermedad que durante muchos años estuvo controlada en el país. “No estamos acostumbrados a ver tantos infectados con dengue. Inclusive atendimos casos de dengue hemorrágico, que son los más peligrosos”, especificó.
Hasta ayer, en el país se habían detectado tres casos de la versión hemorrágica de la enfermedad (todos en Salta). Dos de esos pacientes murieron.
Amenaza
El especialista comentó que los habitantes de Charata están muy preocupados porque jamás padecieron algo igual. “Es un pueblo con muchas diferencias económicas. Pero el dengue los afectó a todos por igual, a los ricos y a los pobres”, contó. Según Fariña lo que ocurre en Chaco y en Salta es una verdadera amenaza para los tucumanos. “Por la proximidad, la provincia puede terminar incluida en el brote de la enfermedad en la región”, explicó. Aunque el riesgo es muy grande, el médico aseguró que “estamos preparados para hacerle frente”.
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