La empresa cuenta con un permiso de cateo otorgado por la provincia para rastrear oro y no es la primera que llega a la zona en busca del codiciado metal. Otras compañía cabó profundas trincheras -4 metros de profundidad x 6m de ancho- a lo largo del mismo campo y se retiró dejando las esas heridas a cielo abierto. Los dos procedimientos contaron con la autorización del propietario del campo, que permitió el ingreso de las mineras a cambio de unos $ 600 mensuales.
Laguna Blanca está ubicado unos 190 kilómetros al noreste de esta ciudad y cuenta con poco más de 300 habitantes distribuidos en toda la zona de influencia. Su actividad económica principal es la ganadería ovina, a una escala de subsistencia signada por la aridez del territorio y la escacez de agua potable.
Lo que generó preocupación entre productores y pobladores del paraje fue la aparición de plataformas de hormigón distribuídas en el campo de los Domínguez, que servirán de base para perforar y sondear la cantidad de oro que hay en la zona.
El breve pero contundente manifiesto de rechazo fue rubricado por unos 80 pobladores y representantes de la comunidad mapuche Pulang Lafken, la cooperativa Nueva Esperanza y Amulein, la Pastoral Social de Bariloche, la Ruca Mapuche Furilofche. También adhirieron vecinos de los parajes Cañadón Chileno y Las Mellizas, el comisionado de Laguna Blanca, los maestros de la escuela, los agentes sanitarios de la zona y la Comunidad del Limay.
El encuentro convocado a través del programa "Patagonia, camino y tiempo" de Radio Nacional Bariloche coincidió con la reunión extraordinaria realizada por los productores de la cooperativa Amulein Com poco antes para analizar el problema.
El periodista Rubén Lagras, relató a "Río Negro" que "la convocatoria fue impresionante, la reunión estaba programada a las dos pero cuando llegamos a la escuela no había nadie y de pronto llegaron todos juntos y desbordaron la escuela. Los vecinos están muy preocupados porque cuando la minera se ponga a producir va a necesitar una cantidad de agua muy grande, que puede secar todas las napas. En Laguna Blanca el agua que queda es subterránea y hay pozos que son comunitarios, el agua es escasa no sólo para el ganado sino para su propio consumo".
Fuente: Diario Río Negro
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